Lavand es un filósofo. Un mago. Un exégeta que interpreta el
texto milenario de la ilusión.
Yo podría ser su aliada. Su secretaria. Su mano derecha.
Fascinada por esas repeticiones.
Aplicada a su fórmula de la lentitud.
Podría no parar hasta hacer de su fórmula
Una filosofía aplicada a todo el volumen molecular que se
moviliza en una caricia.
Una filosofía aplicada a todo el volumen molecular que se
moviliza en una caricia.
No parar hasta inventar un lentificador que actúe sobre las partículas
del placer.
del placer.
Yo, demorada en cada repetición.
(Porque quizá se pueda hacer más lento).