domingo, 19 de mayo de 2013

en el 2010 y en el 2013 también


Que el tiempo pasa, sí, pero uno no sabe cómo, ni cuándo, ni en qué rulo de la historia ni en qué intersección de calles pero un día se abre una grieta en el piso y ves salir a borbotones la historia, o como sea que se llame, y decís qué suerte qué bueno y la emoción te pasa el trapo por la cara como por un vidrio empañado y ahí está, voilá, tomá para que tengas, hacé fuego con esa llamita de ilusión que parecía apagada.
Yo llegaba a la universidad invitada por estudiantes a un foro debate en defensa de la educación pública y llegaba con una pregunta: de dónde salieron estos, cómo salieron tan despiertos tan lúcidos tan informados tan sin miedo, tan dignos pendejos a enfrentar La Resignación esa costumbre académica que nos saca lustre como si fuéramos parte del mobiliario.
Que no nos resignamos! Leo como consigna por todas partes y sigo diciendo y preguntando de dónde salieron hasta que alguien me sopla al oído: son los mismos del 2010, los que estuvieron en las tomas de colegios secundarios en Córdoba y yo digo claro, claro, recuerdo esa entrañable transparencia. Esos que nos dieron cátedra. Ya pasaron 3 años. Ya es el 2013. Y ahora están en la Universidad.
Mientras vuelvo a mi casa no puedo disimular la sonrisa no es un viernes cansado como todos los viernes es un viernes de secreta alegría de saber que pasó el tiempo y que ya están acá. Bienvenidos mascullo en un semáforo mientras me limpian el vidrio y el pibe que  también es un desempañador creo que no se sorprende cuando debajo de la mugre del parabrisas se encuentra con una cara que transporta una sonrisa que viene de atrás, de muy lejos.
Ya están acá. 

1 comentario:

daniel dijo...

muy buen blog
un saludo