viernes, 11 de julio de 2008

un cuerpo a medida


El post de Santa Lucía, patrona de los ciegos, despertó en mí un recuerdo glorioso. Con apenas algunas palabras mágicas: sisa, canesú, enagua, me transportó con absoluta precisión hasta esos días en que, de la mano de Stella Maris me introduje al fascinante mundo de la ropa hecha a medida. Una modista ella, una mujer de figurín de modas, sin duda. Con toda la dulzura de la que era capaz, me enseñó cómo es ese cuerpo dibujado en cortes y pliegues. Me enseñó la inmovilidad necesaria para registrar la longitud del largo de manga, según se trate de llegar al codo o al puño. Un cuerpo cifrado al detalle quedaba plasmado en su cuaderno de notas, una pequeña bitácora donde se asentaban en borrador las operaciones y cálculos que me irían produciendo como mujer. Año tras año, volvía a tomar mis medidas y corregía en sus anotaciones. Yo trataba de espiar sabiendo que ese era un territorio sagrado, casi una declaración de sexo. Supe lo que era el diámetro de caderas y busto aún antes de tenerlo. Luego venía el ritual de la prueba. Nuevamente la inmovilidad, la importancia de la postura, ajustar el largo, entallar, sentir rozar la aguja que hilvana sobre el cuerpo y las risitas cómplices si algún pinchazo sobrevenía a una maniobra fallida.
El comedor de lujo de su casa, invariablemente frío, oscuro e inmaculado era el lugar de la casa donde Stella desplegaba su arte y su oficio. Y donde yo aprendí la docilidad necesaria que requiere el trabajo de producir un cuerpo al detalle.

8 comentarios:

Santaluchia dijo...

Mmm.. la inmovildad y los roces de aguja, me parece Pero que usté está dele afilar para el más fino masoquismo.

claudia huergo dijo...

yo aprendo la fineza de mis maestras, santa. El resto sólo es seguir la pendiente y acomodar el cuerpo para la caída...

pequeño ofidio dijo...

delicioso, Perorata, delicioso.

Ahora me pregunto qué pasó conmigo, porque si es por obediencia, yo debería ser Marilyn Monroe!

claudia huergo dijo...

a la mejor la dibujante estaba un poco confusa, dra. Quizá lo que falló no fue su obediencia, sino el pulso de la dibujante.

la novia del átomo dijo...

he pasado por la misma experiencia que usted, ahora no se como fue que hice de mi cuerpo un cactus o lo que es lo mismo: un alfiletero.

claudia huergo dijo...

novia: los otros dias lei un informe que decía algo así como las leyes sexuales mas absurdas de algunos estados de EEUU. Una prohibía tener sexo con puercoespines. Pero no decía nada de cactus, ni alfileteros. Ud. mientras no esté nomenclada, sigue en carrera. Se lo digo yo.

Anónimo dijo...

Hace unos año vi una muestra en Bs. As. hecha en papel vegetal titulada "cuerpos dóciles" mientras en una pantalla se proyectaban esos cuerpos de papel haciendo movimientos sensuales sugerentes de una cópula. En papel a parte encontré la frase que decía: "sin reproducción el sistema no funciona"
O sea, el control de la natalidad es para aquellos sin poder adquisitivo.En Brasil vi a médicos esterilizar a mujeres,( pobres y negras) sin concentimiento.Ellas no sabían de qué se trataba la pequeña cicatriz que tenían arriba del púbis.¿Cómo se llama esto? Humor negro

claudia huergo dijo...

ud me quiere infartar, anónimo. No me haga humoradas con esas cosas. (Le aclaro que mi docilidad va exactamente en ese sentido:reproducción.seguida de cópula)