
Tuve un sueño que resultó revelador. Necesitaba urgente una poda, pero no sabía que ramas eran vitales y cuales secundarias. Al despertar asumí que ese sueño resume los últimos años de mi vida.
Cuando quiero repasar lo que no funciona de mí, me encuentro con áreas que se han ido modificando, tomando prevalencia sobre otras, zonas que ya han quedado desertificadas, y siempre encuentro también algún brote prometedor, que termino dejando porque quien sabe si ése, justo ése, no es el bueno... . Soy como un jardín en expansión, sin jardinero. Por lo tanto mis formaciones sintomáticas han ido creciendo caprichosamente, sin otro vector que el propio impulso y la escasa resistencia que ofrezco. Hace tiempo decidí que lo mejor sería dejar que mis síntomas tomen el comando de la nave. En realidad, fue una estrategia magra, ya que pensé que al no ocuparme de ellos en absoluto, remitirían antes que si trataba de controlarlos. De modo que me di rienda suelta.
El relevamiento actual me lleva a algunas conclusiones parciales:
1) Quizá no eran síntomas, sino que era simplemente yo, así.
2) Quizá los síntomas se agruparon ya en trastornos, y formaciones de carácter, o sea que igualmente, ya son yo.
3) Haya sido o no prudente dejar que esto llegue hasta aquí, ya no hay mucho más por hacer.
Cuando quiero repasar lo que no funciona de mí, me encuentro con áreas que se han ido modificando, tomando prevalencia sobre otras, zonas que ya han quedado desertificadas, y siempre encuentro también algún brote prometedor, que termino dejando porque quien sabe si ése, justo ése, no es el bueno... . Soy como un jardín en expansión, sin jardinero. Por lo tanto mis formaciones sintomáticas han ido creciendo caprichosamente, sin otro vector que el propio impulso y la escasa resistencia que ofrezco. Hace tiempo decidí que lo mejor sería dejar que mis síntomas tomen el comando de la nave. En realidad, fue una estrategia magra, ya que pensé que al no ocuparme de ellos en absoluto, remitirían antes que si trataba de controlarlos. De modo que me di rienda suelta.
El relevamiento actual me lleva a algunas conclusiones parciales:
1) Quizá no eran síntomas, sino que era simplemente yo, así.
2) Quizá los síntomas se agruparon ya en trastornos, y formaciones de carácter, o sea que igualmente, ya son yo.
3) Haya sido o no prudente dejar que esto llegue hasta aquí, ya no hay mucho más por hacer.