Así como el perro ladra a su reflejo en el espejo defendiendo su territorio de la visita inoportuna de otro macho, en el resto de las especies se produce un fenómeno similar. A la feria de clásicos femeninos abajo citada, se suma la feria de clásicos masculina. Cuando una mujer dirige su deseo a un hombre, este inmediatamente voltea, dirige su mirada a una larga lista imaginaria que lo precede, y formula la pregunta clásica ¿cuántos antes?
Agradecemos sugerencia de filmografía que documente esto.
1 comentario:
Yo a ese perro lo conozco!!
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